Seleccionar página
  • Abarrotada la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional en el concierto de Fin de Año del Grupo Talía
  • Dos horas de emoción y alegría a ritmo de grandes canciones

Ciclo Sinfónico Coral: Navidad con Talía, concierto 2º de abono. Viernes 29 de diciembre de 2023, 19:30 – Auditorio Nacional de Música, Sala sinfónica – Orquesta Metropolitana de Madrid, Coro Talía – Directora titular: Silvia Sanz – Programa: swing, soul, góspel, musical, pop y rock sinfónico.

El viernes 29 de diciembre la Orquesta Metropolitana de Madrid, el Coro Talía y su directora titular, Silvia Sanz, dijeron adiós a 2023 con su tradicional concierto de Navidad en el Auditorio Nacional de Música.  El Grupo Talía despidió el año de la mejor manera y con el mejor público.  Con las entradas agotadas desde hacía unas semanas, el concierto, titulado este año A ritmo de Talía, llenó la tarde de grandes canciones. Fueron dos horas llenas de alegría y emoción para todos los que las vivieron, ya fueran músicos o espectadores.

Son ya 13 los conciertos de Navidad ofrecidos por el Grupo Talía en la Sala Sinfónico y todos ellos se han visto premiados con el respaldo del público. Así lo expresaba la directora Silvia Sanz en su felicitación navideña del programa de mano: “En el Grupo Talía no tenemos palabras para agradecer, año tras año, el éxito de esta cita. Contemplar la Sala Sinfónica abarrotada de público nos llena de felicidad y nos impulsa a continuar con ilusiones renovadas. Pero, lo que verdaderamente cuenta no es el gran número de personas que hoy estamos aquí, sino su calidad y su calidez. Para nosotros es el mejor regalo”.

El mejor ambiente

Y tiene razón al hablar de calidad y calidez, ya que en estos conciertos se siente el calor del público y el ambiente es inmejorable. La alegría reina en estos conciertos y se notas las ganas de pasarlo bien. Había gente de todas las edades y música que podían disfrutar distintas generaciones. El programa A ritmo de Talía abarcaba casi 100 años de música con géneros como el swing, el soul, el góspel, el pop o el rock, desde las melodías más románticas hasta las más desenfadas y festivas.

Los arreglos

Un año más, el compositor y arreglista Alejandro Vivas fue el responsable de casi la totalidad de las adaptaciones para orquesta y coro sinfónicos que se interpretaron en el concierto. Se incluyeron en el programa un viaje por los ritmos sincopados del swing (Porter’s Timeless Tunes), algunos de los temas más recordados del heavy metal y el hard rock (Hooked on the Riff), grandes baladas de amor (Love Matters) y la música española de los 60, 70 y 80 (El guateque y Menuda movida).

Un concierto con alma y mucho swing

La noche comenzó con soul y el optimismo contagioso de una canción como “Ain’t no Mountain High Enough” (1967), tema con el que triunfó el dúo formado por Tammy Terrell y Marvin Gaye. La siguiente obra nos llevó a los años 30 del siglo XX con la envolvente y cálida textura del swing. Porter’s Timeless Tunes era el primero de los recorridos temáticos preparados por el compositor Alejandro Vivas. Incluía “melodías eternas” de Cole Porter que acarician los sentidos. El arreglo, de gran riqueza armónica, incluía “Night and Day” (1932), “Begin the Beguine” (1934) y “I’ve Got You Under My Skin”(1936). Las bailaron Fred Astaire, Ginger Rogers o Eleanor Powell y las hicieron grandes voces como las de Ella Fitzgerald, Frank Sinatra o Bing Crosby, entre otros.  

Recordando a Ray Charles

Georgia, Georgia… Otra de esas canciones que saborean de principio a fin y que mecen a uno en un mar de sensaciones. Fue uno de los grandes éxitos de Ray Charles (1930-2004). En 1979, la Asamblea General de Georgia pidió perdón por los conflictos raciales del pasado y adoptó “Georgia on My Mind” como canción oficial de este estado norteamericano. Sonó a continuación un canto de liberación pleno de ritmo y energía, “Joshua Fougth the Battle of Jericho”. El arreglo de Alejandro Vivas para este espiritual negro se inspira en las armonías del jazz, a la vez que mantiene la vitalidad del canto tradicional y los pasajes orquestales evocan el sonido de compositores como George Gershwin.

Bohemian Rhapsody

Era uno de los platos fuertes del programa. Orquesta Metropolitana de Madrid y Coro Talía ya lo habían interpretado en las dos ediciones del concierto Singing Europe (2024 y 2015). El público ovacionó este tema mítico de Freddie Mercury y Queen. En el brillante arreglo de F. Vrtacnik cobró especial protagonismo la sección de guitarra eléctrica, bajo y batería que se unió a la orquesta sinfónica en este concierto. Las formaciones del Grupo Talía se volcaron de lleno a lo largo de sus diferentes secciones: introducción, balada, solo de guitarra, ópera, rock y coda o final. Sonó el primero de los grandes solos de guitarra eléctrica. Otros llegarían más tarde.

De guateque

El concierto llegó al final de la primera parte con un divertido, y también nostálgico, popurrí salpicado de algunas de las melodías más pegadizas, populares y emotivas de la música española de los años 60 y 70. Este homenaje a la época de los guateques comienza de manera sorprendente. Nadie espera que, ,el coro comience a cantar aquello de “Saca el güisqui cheli…”, sorpresa que hizo reír al público. Volvieron a la memoria muchos recuerdos con “Cuéntame” O “Quisiera ser”. Seguro que el público reprimió las ganas de cantar “Eva María se fue” o “La chica yeyé”. Un recuerdo a la época del Dúo Dinámico, de Raphael, de Nino Bravo, de Concha Velasco, y de exitosos grupos como Fórmula V, que ha compartido en redes el momento dedicado a su canción “Cuéntame”.  

Asuntos de amor

El góspel «Oh, Happy Day», en la versión de la película Sister Act 2, fue el punto de partida de la segunda parte del concierto. Llegaron a continuación las páginas más románticas del programa con otro de los recorridos de Alejandro Vivas, Love Matters. Fue un recuerdo a Elvis Presley con dos grandes baladas “Can’t Help Falling in Love” (No puedo evitar enamorarme) y “Unchained Melody” (Melodía desencadenada).  Es un arreglo de gran densidad orquestal y vocal. El poderoso crescendo de orquesta y coro que pone fin a la segunda balada resulta espectacular. La melodía, desde luego, “desencadenó” emocionados aplausos. Otro éxito de Ray Charles siguió a las baladas de amor, la canción “Hit the Road Jack” con ese “lárgate, Jack y no vuelvas más”.

¡Menuda movida!

El cuarto de los recorridos temáticos preparados por Alejandro Vivas, nos presentó “un viaje con nosotros” a través de la música española de los 80 con un engranaje orquestal ágil, rítmico y divertido. Fue la ocasión para recordar a Alaska y Dinarama, Alaska y los Pegamoides, Los Secretos, Tequila, Radio Futura, Mecano, Nacha Pop, Parálisis Permanente, Gabinete Caligari, Loquillo y Los Trogloditas, Tino Casal, Miguel Ríos… El público lo estaba pasando de miedo y todavía estaba por llegar la última de las piezas.

Hard rock y heavy metal

Fue un vibrante recorrido por lo mejor del rock, hard rock y heavy metal europeos. Alejandro Vivas reúne en esta obra algunos de los riff más valorados y solos de guitarra eléctrica que han hecho historia, en esta ocasión interpretados por el guitarrista Alejandro López, al que se le vio disfrutar y haciendo disfrutar. Fue el momento de recordar a grupos como Scorpions, Led Zeppelin, Eric Clapton, Deep Purple, The Rolling Stones, Mark Knopfler. Fue un recorrido  “electrizante”, poco habitual en una Sala Sinfónica del Auditorio Nacional, que terminó triunfal con el tema“The Final Countdown, de Europe. El público en pie.

Los bises

Muchísimos aplausos, muchísima alegría, un gran ambiente y ganas de más. Se abrió el capítulo de los bises, todo un ritual en los conciertos de Navidad del Grupo Talía, incluida la felicitación, siempre emotiva, de Silvia Sanz, directora titular del Grupo Talía. El primero fue un guiño navideño, Merry Christmas, uno de los coros compuesto por el gran John Williams para la banda sonora de la película Solo en casa. Hubo más bises, todos arreglos de A. Vivas. El segundo fue “Proud Mary”, canción del cantante y guitarrista norteamericano John Fogerty que Elvis Presley incluyó en su repertorio.

Despedida

En ese momento, un sinfín de tonalidades brillantes vistieron el escenario. Los músicos de la orquesta y el coro sacaron de debajo de sus asientos sombreros, boas y complementos navideños de todo tipo, de todos los tamaños y de todos los colores. Con toda esta alegría sonó el tercer bis, “I feel good”, de James Brown. Realmente todo el mundo se sentía bien y nadie se movía de sus butacas. Pero había que decir adiós y la canción de despedida fue “Uptown Funk”, de Mark Ronson y Bruno Mars. Un año más, el concierto de Navidad del Grupo Talía, capitaneado por Silvia Sanz, fue un éxito. Y lo más importante: el público se marchó feliz.